Rosario Peiró presentaba recientemente de forma online el cuento Nevado siempre sonríe en la página de Facebook de ese mismo nombre, una presentación en la que ofreció más detalles sobre una entrañable historia. Nacida en Caudete, compagina su labor como escritora, locutora y especialista de marketing en www.rosapr.es y www.aprendercopywriting.es. En 2014 creó el blog donde narra la historia de su perro, que fue abandonado y al que dejaron ciego antes de ser adoptado. 

Una obra que surge de su profundo amor por los animales, ¿no es así?

Todo se remonta al años 2014 cuando cree el blog y fue incluso terapéutico para mí, porque Nevado es un animal que sufrió maltrato y que tienen una enteritis crónica. Decidí contar su historia también para crear un mayor nivel de conciencia y educación sobre el tema del abandono animal. El proyecto fue creciendo de forma vertiginosa en las redes sociales, tanto en España como en Latinoamérica, y se me ocurrió entrar de lleno a contar su historia en una obra, a modo de ventana  que uniese a la gente amante de los animales.

¿Es un cuento infantil también recomendable para el público adulto?

Sí, yo soy madre y me doy cuenta que es muy importante la educación en este tema, transmitir unos valores para que los niños aprendan desde pequeños el respeto y la sensibilización en cuanto al bienestar animal. Me puse a trabajar hace un año y lo presenté a varias editoriales -algunas de las cuales se interesaron por el proyecto-, pero finalmente opté por la autopublicación. La obra, de 50 páginas, incluye ilustraciones de la artista paquistaní Yeah Zoha Naeem, con la que trabajé en ello durante la etapa del confinamiento.

      El cuento está indicado a partir de tres años de edad, pero lo están leyendo incluso en las residencias de ancianos y en colegios para alumnos de todas las edades, familias que lo compran para leerlo en casa con los pequeños, gente mayor, etcétera.

¿Nevado sigue con usted?

Nevado continúa conmigo desde que lo adopte hace 11 años y medio. Es un  perro mestizo, de algo más de 12 años, que me ha aportado una cantidad de amor tremendo, porque es un ejemplo de lucha, ya que el animal no tenía ningún tipo de trauma a pesar de lo que vivió, él me hace querer ser mejor persona y me ha aportado grandes lecciones de vida. Desde que quedé embarazada Nevado siempre me acompañó, incluso dormía encima de mi barriga,  y ahora no para de jugar con mi hijo.

(Más información en la edición impresa).