Jumilla adelanta la vendimia para las variedades de regadío

Redacción
-

La uva Monastrell, la más extendida en la Denominación de Origen Protegida, ralentiza su maduración y se retrasa su recogida

Imagen de la vendimia en una explotación . - Foto: DOP Jumilla

Como cada temporada, se inicia la vendimia por fases en la Denominación de Origen Protegida Jumilla. Este año se ha visto adelantada a principios de agosto con las variedades blancas y alguna tinta, como la Syrah procedente de viñedos en regadío y ubicados en las zonas más cálidas. Mientras, la mayoría de los viñedos que se encuentran en secano, debido a la sequía que se ha arrastrado desde la campaña anterior, a la cual puso fin las lluvias acontecidas en junio, presentan una brotación irregular dentro de la misma parcela, lo cual augura una vendimia difícil e irregular.

Varias son las bodegas que iniciaron a principios de agosto la recolección de sus uvas blancas, y en estos momentos se están vendimiando las variedades blancas en el sur de la DOP Jumilla.

La diferencia de maduraciones entre el secano y el regadío es muy notable, afectando también a la propia planta, la cual presenta en estos momentos racimos en distintas fases de maduración, debido a la brotación irregular de sus yemas. El calor de mayo adelantó la brotación de algunas yemas, pero la intensa sequía vivida hasta que llegaron las lluvias en junio hizo que esta se detuviera y se retrasara. Para la Monastrell, la variedad reina de la DOP Jumilla, se espera que, llegado el tiempo de su recolección en octubre, la vid se homogeneice y termine igualando sus maduraciones.

Reducción de cuotas.

El Consejo Regulador de la DOP Jumilla aprobó las normas de la campaña 2023/2024 en el pleno celebrado a mediados de julio, las cuales recogen los requisitos de obligado cumplimiento para bodegas y viticultores durante la vendimia, así como recomendaciones y plazos para la declaración de cosecha y producción. En este Pleno se aprobó también una reducción de cuotas para el viñedo de manera excepcional para esta próxima campaña, como ayuda al viticultor debido a la merma de producción que la sequía está provocando en el viñedo.

Con el objetivo de garantizar el cumplimiento de estos requisitos por parte de los operadores, el Órgano de Control del Consejo Regulador ha incorporado a su plantilla a 6 inspectores, quienes se encargan de realizar tanto controles de rendimiento de uva en campo como de entrada de uva en bodega. Los inspectores comprueban en campo, previo a la vendimia, si las parcelas seleccionadas cumplen con los rendimientos máximos autorizados por la Denominación de Origen y establecidos en su Pliego de Condiciones, con el correspondiente levantamiento de actas y la descalificación de la producción total de dichas parcelas para esta campaña, en los casos en los que se excedan dichos rendimientos.

Los rendimientos se rigen según la clasificación de parcelas, extensivo e intensivo, siendo los máximos autorizados, en plantaciones de cultivo extensivo, de 5.000 kg/ha en variedades tintas, y de 5.625 kg/ha en variedades blancas. En plantaciones en cultivo intensivo, el máximo rendimiento permitido es de 8.750 kg/ha para variedades tintas y blancas.