Osasuna cayó en casa (0-3) ante un Celta de Vigo al que el choque se le puso muy de cara cuando en tan solo dos minutos Larsen y De la Torre firmaron un 0-2 que ayudó a su equipo a vencer cuatro jornadas después para distanciarse del descenso.
El equipo navarro regresó al estadio El Sadar con el objetivo de mantener la buena dinámica de resultados delante de su gente con tres victorias consecutivas como gran estímulo. Con numerosos cambios en el once, pero con el mismo sistema de cinco futbolistas en la zaga, los rojillos recibían a un Celta muy necesitado.
Budimir tuvo una clara ocasión en el minuto 9. El croata remató sin pensarlo a la izquierda de la portería, pero Vicente Guaita detuvo el disparo con una gran parada. El Celta puso empeñó en jugar al contragolpe hasta que encontró el premio con el gol de Larsen, quien finalizó una rápida transición dentro del área.
El Celta noquea a Osasuna y respira - Foto: Jesus DigesSin tiempo para rehacerse, el Celta asestó el segundo golpe tan solo un minuto después. De la Torre ganó la posición a David García con un magnífico desmarque tras recibir un pase preciso en el área. 0-2, a Osasuna le tocaba remar y se puso a ello con más corazón que fútbol.
Los de Rafa Benítez quisieron dormir el duelo con pérdidas de tiempo que impacientaron a Arrasate y los suyos, quienes no podían atravesar las líneas de un ordenado Celta. La tarde se puso complicada para los locales cuando el colegiado decretó el descanso.
Sin ningún cambio en ambas escuadras, Osasuna salió del vestuario con algo más de chispa para encarar una posible pero complicada remontada. Volvió a la defensa de cuatro para ganar en presencia en la zona central. El Celta fue más conservador, defendiendo el 0-2 con un buen trabajo coral.
El Celta noquea a Osasuna y respira - Foto: Jesus DigesLas ocasiones y el manejo del partido eran locales, pero el electrónico corría a favor de los celestes. De la Torre intentó marcar desde la media distancia tras un rebote, acabando la jugada en saque de puerta para el rival.
Osasuna jugaba a la ruleta rusa con un Celta que quiso sentenciar el partido a la contra. Budimir falló delante de Guaita tras un pase de Mojica. No fue el día de uno de los máximos anotadores de la competición, quien jugó todo el choque tras los 68 minutos del miércoles en Barcelona.
El griego Anatasios Douvikas hizo el 0-3 en el minuto 90 para dejar helado a El Sadar, que comenzó a vaciarse ante el mal partido que cuajaron los suyos.
Finalmente, el Celta se llevó tres valiosos puntos para volver a ganar cuatro jornadas después en su lucha por zafarse de unos puestos de descenso con los que lleva coqueteando todo el año.