El coronel del Centro Nacional de Adiestramiento de Chinchilla (Cenad), Pedro Latorre Vila, hizo balance de la actividad que acogió el campo de maniobras albacetense a lo largo del año 2022. Poco a poco este lugar de entrenamiento del Ejército de Tierra, principalmente, recobra su ritmo de actividad después de la pandemia del Covid-19. A lo largo del año 2022, en el Cenad se formaron alrededor de 10.150 militares y en su territorio operaron más de 1.800 vehículos militares, de los que 900 fueron pesados, unos 850 ligeros y algunos con cadenas. Además, participaron en maniobras una treintena de helicópteros, muy concentrados en el ejercicio toro, que congregó en este campo de entrenamiento a 23 aeronaves. Son cifras muy similares
Cabe destacar los ejercicios específicos que realizaron varias unidades militares, como el Mando de Operaciones Especiales de Alicante o la Brigada Paracaidista (Bripac), antes de desplazarse a otros países en conflicto o en una situación de tensión política y militar. Y es que el Cenad es uno de los escenarios idóneos para ensayar sobre un terreno lo más parecido al que luego se encontrarán en las operaciones en el extranjero.
Por otra parte, hay que resaltar las acciones para aumentar la seguridad del campo de maniobras, sobre todo en la zona de caída de los proyectiles, por el peligro de incendio. Los cortafuegos se renovaron para intentar que no se produzcan fuegos por las explosiones y más en este año en el que la sequía hizo que todo el entorno esté más seco que en años anteriores.
Los ciudadanos perciben el papel de las Fuerzas Armadas cuando participan en las operaciones tanto dentro como fuera de nuestras fronteras, pero para que lleguen a buen puerto es necesario que se hayan entrenado previamente en unas instalaciones punteras. Ahí el Cenad se destapa como una instalación fundamental dentro de la estrategia interna de las Fuerzas Armadas, sobre todo del Ejército de Tierra, pero también de la Armada, como quedó demostrado en este 2022 pasado. La labor que llevan a cabo los hombres y mujeres del Cenad pasa un tanto desapercibida, pero es fundamental para que las unidades de las Fuerzas Armadas españolas sean eficaces y tengan tan alta consideración en el extranjero.
Es importante que la sociedad sepa valorar este papel estratégico fundamental del Cenad para garantizar la convivencia pacífica tanto en España como en otros países donde acuden los militares españoles para ayudar a mantener la paz. Por ese motivo, la sociedad albacetense en concreto debe valorar el Cenad y todo lo que allí se hace, así como respetarlo, porque, aunque pueda parecer una paradoja, su esfuerzo como militares sirve para preservar la paz y la convivencia democrática.