La tromba de Alpera provocó un aluvión de problemas en Almansa

E.F.
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Las lluvias dieron un respiro tras las fuertes precipitaciones del jueves, pero para el día de hoy la Aemet vuelve a poner en alerta amarilla las comarcas septentrionales por tormentas

Efectivos de Protección Civil cortan un camino próximo al embalse almanseño. - Foto: Almansa Emergencias

Las fuertes lluvias caídas sobre la provincia de Albacete el jueves aún causaban problemas en varios puntos de la provincia de Albacete en el día de ayer, sobre todo en las comarcas más orientales.

Además, cabe destacar que para el día de hoy, sábado, la mitad norte de la provincia vuelve a estar en alerta amarilla por posibles tormentas, con precipitaciones hasta 15 milímetros en una hora.

En cuanto al día de ayer, cabe destacar que en Almansa, la madrugada fue bastante intensa para los equipos de emergencia, a causa de las fuertes lluvias caídas en municipios como Alpera, de más de 100 litros por metro cuadrado.

El caudal bajó desde la Sierra del Mugrón y, desde allí, a la zona de Venta la Vega y las inmediaciones del Santuario Belén, cuyos accesos quedaron cortados porque el agua pasó por encima de la calzada.

No muy lejos, en el embalse de Almansa, el pluviómetro de la Confederación del Júcar marcó casi 17 litros por metro cuadrado en 24 horas. Una precipitación reseñable, pero dentro de los límites.

El problema fue lo que bajó por las ramblas y los barrancos. Hubo una entrada de agua tan intensa que, en pocas horas, sus reservas crecieron ocho puntos porcentuales, al pasar del 51% al 58%.

Por  esta causa, las autoridades decidieron proceder al desembalse del pantano, lo que se hizo por su compuerta auxiliar de regadío y por una de las compuertas del desagüe de fondo.

La medida, explicaron, se tomó para «recuperar margen» de laminación de posibles avenidas, en el caso de que se repitiese un episodio de fuertes lluvias.

En paralelo, se pidió a los vecinos que tuviesen precaución en la zona de la rambla que está aguas abajo de la presa, además de recomendar a la población que no cruzase los pasos que estuviesen inundados por la corriente.

Las incidencias en otras zonas de la provincia consistieron en numerosos campos anegados en localidades como Higueruela o Montealegre del Castillo, o calles convertidas en desagües improvisados en Alcaraz o Letur.

En todo caso, lo peor del episodio ya había pasado ayer. Si el jueves se batieron récords con los 106 litros de Bonete, los 100 de Alpera o los 64 de la propia capital de la provincia, ayer viernes hubo lluvias, sí, pero menos intensas.

Las precipitaciones fueron bastante extensas, sobre todo en las comarcas limítrofes con Murcia y la Comunidad Valenciana, pero con registros muy discretos de uno o dos litros por metro cuadrado, lejos de lo que se había producido sólo 24 horas antes.