Parece normal que la denominación de la calle cercana a una parte del edificio del Hospital General Universitario lleve el nombre del arquitecto, que en su día diseñó el que entonces se llamó el Hospital Provincial. Ramón Casas Massó, arquitecto provincial de Albacete desde 1891 hasta su fallecimiento en el año 1921, dejó huella de su gran profesionalidad y preparación en edificios públicos y particulares de la ciudad durante su carrera profesional, que compaginó con otras actividades como la de comandante de la brigada de bomberos, miembro de la Junta Provincial de Sanidad, en la que sobresalió por sus planteamientos y resoluciones, también perteneció a la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, recibiendo además la Cruz de Alfonso X El Sabio. Todo un personaje.
Ramón Casas es considerado como uno de los albaceteños más destacados de su tiempo, entre los siglos XIX y principios del XX, pues dejó un testimonio claro de su capacidad y una herencia en el ámbito de la arquitectura muy digna y de considerable importancia. Son varios los proyectos arquitectónicos que quedaron en el recuerdo, pero sin lugar a dudas sobresalió especialmente por el proyecto del Hospital Provincial, que se construyó gracias a la tenacidad de este arquitecto, quien advirtió constantemente de la necesidad de la construcción de un hospital que sustituyera al antiguo en estado ruinoso, ubicado enfrente de la Catedral, donde hoy se ubica el edificio del nuevo Ayuntamiento.

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