El Pleno del Ayuntamiento de Hellín tuvo dos caras. Una de absoluta normalidad, en la que los asuntos económicos y medioambientales presidieron el orden del día; la otra, de auténtica política de trinchera, en la que no se ahorraron descalificaciones mutuas, a causa de la amnistía.
De la cara 'A' de la sesión, destacaron la aprobación del Plan de Emergencia de Situaciones de Sequía municipal, y el Convenio con Fomento de Construcciones y Contratas para convertir un antiguo vertedero en un bosque que actuará como sumidero de carbono.
También hay mencionar el rechazo de la moción del PSOE que pedía al Ayuntamiento que se sumase a su alegaciones contra el recientemente aprobado Plan de Sequía de la Demarcación del Segura, así como la renuncia a dos subvenciones por imposibilidad práctica para ejecutarlas.
Todo lo antedicho, salvo la moción, salió por unanimidad o al menos sin votos en contra. Incluso se aprobaron sin grandes problemas dos cuestiones de urgencia relacionadas con la financiación de las obras de la Avenida de la Libertad y la Escuela Infantil de Agramón.
Pero entonces llegó la cara 'B', esto es, la moción conjunta del PP y Vox "en defensa de la Constitución Española, la Igualdad de los Españoles y el respeto al Estado de Derecho y la democracia", esto es, la moción sobre la Ley de Amnistía.
A título anecdótico, cabe decir que la moción conjunta de PP y Vox lo fue en sentido literal, hasta el punto que el concejal del del PP, Pedro García Sequero, y la concejal de Vox, Raquel Tomás, leyeron a medias su texto, el primero la parte expositiva, y la segunda la parte resolutiva.
Más allá de la anécdota, el debate derivó de golpe al clásico enfrentamiento entre bloques y en un intercambio sobre lugares comunes en los que el PP enumeró la larguísima lista de colectivos que se han pronunciado contra la amnistía y el PSOE se remontó al reinado de Fernando VII.
Por tiempos, de las cerca de dos horas que duró el Pleno, menos de la mitad de la sesión fue para la cara 'A' y más de la mitad fue para la cara 'B'. Por cierto, la moción se aprobó con el voto a favor del PP y de Vox, frente al voto en contra del PSOE, como era previsible.
Acabado el debate de la moción, se pasó al turno de ruegos y preguntas. Se habló de la organización y las cuentas de la Feria de Hellín, de las Fiestas de San Rafael, una petición de subvenciones y del desarrollo de obras y contratos públicos. Tras ello, se levantó la sesión.