Más de 20 toneladas de atún a bordo de un camión que ardió el pasado miércoles en un área de servicio de Chinchilla, junto a la autovía A-31, se pudrían en el mismo lugar del siniestro sin que nadie hiciese nada por retirar el pescado, cuyo olor padecían desde entonces los trabajadores de la gasolinera y el restaurante situados en la misma área de servicio, aunque sus quejas dieron lugar a que a última hota de la tarde se procediese a retirar el pescado de la zona y que, por la noche, todo estuviera ya limpio.Como se recordará, pues La Tribuna de Albacete informó de ello, sobre las seis y media de la madrugada del miércoles 16, el remolque de un camión procedente de Vigo que transportaba atunes sufrió el reventón de una de sus ruedas el cual, a su vez, provocó una chispa que provocó un incendio, el cual consumió la caja y su contenido.