El Hospital General Universitario cerró el pasado año 2021 con un total de 500 infartos atendidos, de los que la mitad fueron tratados con procedimientos intervencionistas, es decir, se realizaron 240 angioplastias primarias, por presentar los pacientes una obstrucción total de alguna de sus arterias coronarias, mientas que el resto de infartos menos graves, donde no hay una obstrucción total de la arteria, sino un estrechamiento que impide el flujo sanguíneo de forma sostenida, se resuelven con otros tratamientos entre las 24 y las 48 horas posteriores al diagnóstico. El objetivo primordial del tratamiento en los pacientes con infarto agudo de miocardio es el restablecimiento rápido y sostenido del flujo coronario. Antes de la implantación de las angioplastias primarias, la trombólisis era el tratamiento efectivo y fácilmente accesible para conseguir desatascar las arterias obstruidas, pero en muchos pacientes tratados con trombolíticos no se consigue recanalizar la arteria.
Recientemente en el Congreso Nacional de Hemodinámica organizado por la Asociación de Cardiología Intervencionista, que ha contado con asistencia de profesionales del Servicio de Cardiología del Complejo Hospitalario Universitario de Albacete, se presentaron los datos de actividad de Albacete, que ponen de relieve que el tratamiento del infarto agudo, lo que se conoce como angioplastias primarias, ha experimentado una subida al cierre de 2021 del cinco por ciento en el CHUA y en toda la región, porcentajes similares también a los actuales de la media nacional.
En los últimos siete años la incidencia de angioplastias primarias realizadas en el Hospital de Albacete ha oscilado entre las 210 y las 250. En concreto, en 2021, se realizaron 240 y en 2020 fueron 250.
La angioplastia coronaria primaria es un procedimiento que consiste en la realización de un cateterismo cardíaco, que permite la visualización de la arteria oculta ocluida por el trombo y la resolución de dicha obstrucción mediante el implanta de una pequeña prótesis endovascular conocida como «stent coronario».
tiempo. Una solución que se aplica en la mitad de los infartos agudos que se producen y que se activan a través del Corecam (Código de Reperfusión Coronaria en Castilla-La Mancha), un protocolo de coordinación entre el Servicio de Emergencias y las unidades de Hemodinámica y las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) Coronarias de la región.
Con datos de 2021 la mortalidad hospitalaria por infarto agudo de miocardio tras la realización de un cateterismo urgente (angioplastia primaria) en el CHUAfue del cinco por ciento, sin la utilización de este procedimiento sube al nueve por ciento.
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