La Nerpio-Alcaraz celebra su edición número 40

A.M.
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El Centro Excursionista de Albacete organizó la marcha que une las dos sierras de Albacete a través de unos paisajes que se mantienen casi como cuando se celebró la primera edición

Fotografía de los participantes en la cumbre del Pico de la Sarga. - Foto: C.E.A.

Con una fotografía de recuerdo bajo el Arco de Zapatería de Alcaraz, el pasado sábado se ponía punto final a la XL Marcha Nerpio-Alcaraz, una travesía de las sierras albacetenses en siete jornadas, organizada por el Centro Excursionista de Albacete. 

Los participantes, cerca de una treintena, salieron de Nerpio el día 4 de diciembre de 2022 para dirigirse a pernoctar, tras un recorrido de unos 18 kilómetros, a la Venta de Tiziano, en un establecimiento hostelero junto al río Zumeta. 

Al siguiente día, tras caminar unos 20 kilómetros, en los que se recorrió un tramo por la provincia de Jaén, cruzaron el río Segura para llegar ya de noche a Parolix, una pequeña pedanía de Yeste en la que pasaron la noche en las viejas escuelas.

El día 6, en la tercera etapa, de algo más de 22 kilómetros, la meta estaba situada en Los Giles, un pequeño núcleo de población situado en el llamado Hueco de Tus, en el valle del río del mismo nombre. 

La cuarta etapa, el día 7, llegó a Villaverde de Guadalimar, en un recorrido de unos 16 kilómetros que  atraviesa el impresionante Calar del Mundo, con numerosas dolinas que recuerdan a un paisaje lunar. 

En la quinta etapa los participantes ascendieron a los picos de la Sarga y el Padrón, descendiendo posteriormente hacia el refugio de La Pumarica, propiedad del propio Centro Excursionista de Albacete, cerca de Riópar, donde se pasó la noche después de caminar unos 16 kilómetros. 

Desde La Pumarica, en la sexta etapa, de 22 kilómetros, se atravesó la Cuerda del Almenara, a la que da nombre el pico más alto de la Sierra de Alcaraz, el Almenara, de 1.796 metros de altitud, para llegar y pernoctar en Salobre. 

La séptima y última etapa, el 10 de diciembre, con un recorrido de algo más de 16 kilómetros, que hubo que acortar debido a la aparición de la lluvia y el barro, se llegó a Alcaraz, después de haber dejado atrás la localidad de Vianos.

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