La Sección Segunda de la Audiencia Provincial ha juzgado esta mañana a un hombre que se enfrenta a ocho años de cárcel por agredir sexualmente a una mujer a la que conocía, hechos que él ha negado. En concreto, el procesado, A.G.R., ha manifestado que conocía a la denunciante y que en el pasado mantuvieron relaciones sexuales en alguna ocasión, pero que luego ella tuvo una pareja, con la que incluso habían convivido en una infravivienda que había en una parcela. 

En cuanto a lo sucedido sobre las 23,20 horas del 12 de octubre, señaló que la denunciante le había dicho en varias ocasiones que fuera a la vivienda y que por eso allí esa noche y que ella le abrió el candado para que entrara y que juntos consumieron medio gramo de cocaína fumada y una litrona. Después de eso el procesado se marchó de la casa sin mantener relaciones y ella cerró el candado.

Por su parte, la víctima señaló que había tenido alguna relación sexual con el acusado pero hacía años y también dijo que luego ella se hizo novia de un rumano y que todos vivieron juntos en una especie de vivienda que hay en una parcela del camino de Morata, junto con dos personas más. Sin embargo y ya tras romper con su pareja, ella se quedó viviendo sola en la citada casa, en la que se presentó el acusado, sin avisar, en plena noche, cuando ella estaba en la cama. El acusado le pidió tabaco y ella le dijo que se fuera. En ese momento, el acusado la agarró de una pierna y un brazo y la introdujo en la habitación, de la que habían salido y usando la fuerza, le bajó el pantalón y las bragas y le introdujo los dedos en la vagina. 

Los gritos de la denunciante alertaron a una pareja de búlgaros que vivían a unos metros de la casa en una tienda de campaña, que fueron hasta el lugar, por lo que el acusado salió dijo que no pasaba nada y se marchó del lugar, momento en el que la denunciante llamó a la Policía.