Zancudos con unos cisnes que son hinchables, un hada en la luna que está rodeada de estrellas iluminadas. La gente que fue pudo ver dónde habitaba la imaginación. El Parque Mágico abrió sus puertas y ofreció un montaje escénico y artístico con escenografía, artistas,   espectáculos   aéreos, proyecciones   de   luz   y   efectos   sobre   el   entorno,transportando así al público visitante a un mundo lleno de fantasía y originalidad.

Este espectáculo se desarrolló en el Parque Abelardo Sánchez de 18 a 22 horas y fue el lugar perfecto para reunirse con amigos y familiares, compartir momentos inolvidables y sumergirse en el espíritu navideño.

No importa la edad, todos encontrarán algo especial que les haga sonreír. ¿Dónde habita la imaginación?, ¿qué provoca en los más pequeños el mundo artístico, de representaciones oníricas y en sus familiares?, ¿cómo expresan los artistas con sus trajes y disfraces?

 El director artístico de la parte circense de Globaleventus, Abraham Pavón, explicó que lo que «repetiremos hoy (por ayer) son cuatro espacios donde van a ir diferentes iluminaciones con las que se ilumina todo el parque donde la gente puede entrar por la puerta principal que tiene un detalle de iluminación para que la gente se dé cuenta y lo primero que lo recibe son dos zancudos donde hay un photocall y se pueden hacer una fotografía con ellos. Si continúas andando, enfrente del colegio que hay, tenemos a una chica subida en una luna, con unas estrellas, todo iluminado, con guirnaldas, con diferentes colores que lo que simula es como si fuera un cielo y la gimnasta hace unas acrobacias aéreas en una luna. Si continúas hacia la fuente te vas a encontrar con una dama de cuatro metros de altura que es la dama de la Navidad que tiene música y es una estructura muy grande y genera un efecto de nieve con plumas que va tirando ella». Asimismo, si continúas, justo enfrente de la fuente te encuentras con una bailarina que está dentro de una burbuja navideña y por el camino te vas encontrando una alas iluminadas, hay algunos zancudos más por el camino familiar en lo que ves diferentes espacios con los diferentes artistas».

Respecto a si la gente se queda estupefacta, explicó que «de seis a ocho había un montón de gente y entre los diferentes espacios se arremolinaba mucha gente, cada persona se hacía fotos, se quedaban ahí sorprendidos y a partir de las 21 horas empezó a irse la gente por el frío típico que hace en Albacete, que es muy típico de esta estación del año que también le da su ambiente.

«Hemos unido el circo con la iluminación, con un poco la perspectiva ambiental de organización de eventos y estos parque de tu ciudad o de tu pueblo convertirlo en algo diferente para que ese paseo navideño tenga estos toques mágicos», explicó Abraham Pavón, para agregar que «este espectáculo ha itinerado por Calamocha (Teruel), Badajoz, Getafe (Madrid) en varios lugares».