De manera paralela a las reuniones de ministros en Toledo se ha celebrado esta tarde un seminario en el que se habló mucho de la industria de defensa española y europea. El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, arrancó el encuentro apostando por el «desarrollo de las capacidades de la industria de Defensa, pensada a escala europea y desde Europa». También insistió en que desde el Gobierno de España se apoya «siempre una mayor coordinación y colaboración entre la UE y la OTAN». Expuso que la importancia de apuntalar esta sinergia «ha quedado más que demostrada para hacer frente a la agresión de Rusia y Ucrania».

La ministra de Defensa, Margarita Robles, incidió también en la idea de que el Gobierno de España «está firmamente comprometido en la industria de Defensa». Comentó que «frente a algunos que creen que la paz se consigue con bonitos discursos»,  la guerra de Ucrania ha puesto de relieve las «vulnerabilidades» de Europa. Además rebate a los que le ponen 'pegas', destacando que es una industria que genera empleo.

El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, expuso que desde 2008 la UE «ha pasado por un proceso silencioso de desarme en sus capacidades militares y su capacidad industrial para la Defensa». Lo atribuye al fin de la guerra fría, la crisis del euro o la confianza en el paraguas norteamericano. Ahora la Unión Europea quiere cambiar esa tendencia sobre todo a raíz de la guerra de Ucrania. Y además cree que es necesario desarrollar proyectos que involucren a varios países o empresas como se ha hecho con la aeronáutica civil.

En esa idea insistió también el comisario europeo de Mercado Interior, el francés Thierry Breton, que destaca que desde la Unión Europea se están dando fuertes incentivos a proyectos que compartan diversas empresas y países. «Mantenemos la capacidad de producir de todo», destacó, poniendo el ejemplo de tanques, aviación o misiles, pero el reto está en aumentar la capacidad de producir más.