La ordenanza reguladora de espacios públicos de Albacete para fomentar la convivencia ciudadana y el civismo (Ordenanza Cívica) establece que el Ayuntamiento de Albacete, en algunos casos, podrá «sustituir la sanción de multa por sesiones formativas, participación en actividades cívicas u otros tipos de trabajos para la comunidad». Una opción que se ofrece, por ejemplo, a la ciudadanía sancionada por la práctica del botellón, y a lo largo del pasado ejercicio, fueron cinco personas (tres mujeres y dos hombres) las que decidieron cambiar las sanciones por beber en la calle por trabajos en beneficio de la comunidad.
Así se desprende de la Memoria del Plan Municipal de Drogas correspondiente a 2022, que indica que la sanción mínima (121 euros) se corresponde con 24 horas de prestación, que se desarrollan en alguno de los servicios municipales o en entidades colaboradoras. En concreto, en esta ocasión los sancionados realizaron los trabajos en Asprona, la asociación Metasport, IFAD y la Universidad Popular.
Pero este dato no es el único que ofrece la Memoria del Plan Municipal de Drogas de Albacete, una herramienta que sirve de elemento aglutinador y decoordinación de los programas y actividades relacionados con la intervención social en esta materia, reforzando la eficacia y eficiencia de las intervenciones. Dicho plan dispone de un programa de ocio y tiempo libre, que durante el pasado año desarrolló dos talleres y un ciclo de cine. Los talleres que buscan prevenir el consumo de drogas y las conductas adictivas llegaron a cerca de un millar de jóvenes de entre 16 y 18 años, mientras que en el programa de cine participaron 748 adolescentes y 46 profesores.

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