El realizador albacetense Ismael Olivares García estrenaba recientemente el documental Dolor, realizado con motivo del 75 aniversario de la Cofradía de Nuestra Señora del Dolor de Hellín, en el Teatro Victoria de esta localidad, un trabajo que también puede verse por capítulos en el canal de YouTube de la propia Hermandad.

Después de cursar la carrera de Sociología en Granada y Florencia, Olivares comenzó en el mundo del audiovisual con otro trabajo de temática semanasantera, Silencio, allá por el año 2012, vinculado a las célebres tamboradas de la población hellinera. 

«En este caso se trata de una pieza de videoarte -desvela-, que me llevó un año de trabajo y se rodó durante la pasada Semana Santa, aprovechando también instantes como la preparación de los pasos procesionales o el momento en que se visten los nazarenos; digamos que es un recorrido desde que sale la procesión con esta imagen en la jornada de Jueves Santo, comenzando por el momento en que la engalanan hasta completar todo su itinerario, acompañado de un texto ficcionado por la Virgen María -en la voz de la actriz Elena Olmos- que posee un lenguaje muy actual, donde se expresa el profundo sentimiento de dolor de una madre ante la pérdida de un hijo».

Técnica original.

El cineasta precisaba que «es un trabajo rodado en anamórfico, una técnica que dilata las secuencias de forma más orgánica... digamos que se estira el plano y salen esos destellos típicos que podemos ver en series como en Stranger things o en westerns, con una apariencia muy apaisada». 

Ismael Olivares destaca la gran acogida que tuvo el estreno de la cinta, producida por Prosonarte, con la gente aplaudiendo en pie, emocionada y con lágrimas en los ojos, «la verdad es que llegó mucho a los espectadores, fue un acto sobrecogedor,  porque además dedicamos este documental a Pilar Barra, una amiga recientemente fallecida».

Considera que además de conectar con las señas de identidad de todo un pueblo, ha logrado externalizar su contenido, «hacer algo exportable al resto del mundo, creando un mensaje universal: lo que una madre puede llegar a sentir al ver morir a su hijo de forma tan cruel».  

otros trabajos. El director también ha realizado varios cortometrajes, caso de Santa, rodado en Letur, y La llorona, ambientado en Hellín y protagonizada por la eurovisiva Chanel (en la imagen de la izquierda), que tuvo una gran repercusión mediática, además de numerosos spots publicitarios, caso del vídeo promocional de Albacete proyectado en Fitur.

Adelanta a este diario que «actualmente, además de los trabajos constantes de publicidad  que tenemos en la productora, estoy trabajando en el proceso de escritura del guión del que será mi primer largometraje».

En ese sentido, preguntado por si continuará en la línea esbozada en anteriores trabajos de ficción, Ismael Olivares aseguraba que «de momento sólo tengo un pequeño borrador y empezaremos ahora con los test, aunque debo reconocer que el género en el que me siento especialmente cómodo es el de un terror que puede tocarse, que no habla de monstruos, sino que es mucho más cercano, estaría en los destinos, en las propias familias o en las personas próximas».