Un 'hackeo' impide recargar el 'bonobús' a miles de usuarios

A.G.
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Los comerciantes de los puntos de recarga sufren la indignación de los consumidores y la concesionaria habilita un horario extraordinario en su oficina de la estación, al no solventarse el ataque informático a la prestadora del servicio de prepago

Imagen de archivo de un autobús urbano de Albacete. - Foto: Víctor Fernández

Lo que parecía un problema puntual de conexiones ha acabado convirtiéndose en un trastorno considerable tanto para los usuarios del autobús urbano de Albacete como para los responsables de los establecimientos que ofrecen las recargas de las tarjetas de transporte, el conocido como bonobús, que llevan desde la tarde del lunes sin poder prestar ese servicio.

El problema surge de un ataque informático a Prepay Technologies, la empresa con la que tiene contratados los servicios de prepago a la concesionaria del servicio en la capital, Subús. Esta no es la única afectada pues son más las mercantiles clientes de esa prestación, que afecta al transporte en casi una veintena de ciudades, con Burgos o Córdoba entre ellas. Al respecto, y según recoge Europa Press, la empresa señalaba que «se están agilizando los trabajos de recuperación junto con la colaboración de las autoridades pertinentes». 

Dada la situación, cuya solución parecía complicarse según avanzaba la semana, los consistorios afectados han tomado diversas medidas, destacando entre ellas la decisión burgalesa de decretar la gratuidad del servicio hasta el próximo lunes.

Mientras, la concesionaria en Albacete publicaba un comunicado en su aplicación en el que anunciaba la habilitación de su oficina de atención al cliente en la Estación de Autobuses como punto de recarga, tanto en la tarde de hoy viernes, de 16 a 19 horas, como en la mañana de sábado, de 10 a 13 horas. 

De acuerdo a la empresa, esa decisión se adopta «para aquellas personas usuarias cuyo bono haya caducado o no pueda recargarlo, con motivo de la incidencia genera a nuestra empresa en los puntos de recarga». Para llevar a cabo ese trámite, «es imprescindible aportar el DNI y el título bonificado que tenga vigente», señalan, añadiendo que «la oficina de atención al cliente tendrá este horario extraordinario en dichos días, únicamente para tal final, volviendo a su horario y atención habitual, en el que también gestionaremos las recargas, a partir del lunes 8 de abril». «De persistirla incidencia, el lunes 8 también prestará el servicio extraordinario de recarga de manera excluvisa en horario de 16 a 18,30 horas», añaden. 

Esa decisión llega después de que la indignación de los usuarios haya ido creciendo durante la semana, teniendo que afrontarla principalmente los comerciantes de los cerca de 50 puntos de recarga existentes en la ciudad, principalmente estancos y papelerías, según detalló a La Tribuna Julián Ortega, regente del estanco situado en el número del Paseo de la Circunvalación, en el barrio de Fátima. 

«La gente no para de quejarse y nos echan la culpa a nosotros, porque se ha extendido el bulo de que no queremos recargar los bonos», explicaba Ortega, quien quiso puntualizar al respecto que «este es un servicio que se presta sin ánimo de lucro, ya que no obtenemos ningún beneficio». «Cada semana hacemos entre 500 0 600 recargas», señalaba, aportando así una cifra de la relevancia que tiene un servicio público que llega a sumar más de 400.000 viajes en algunos meses del año.

El problema es grande para esos usuarios ya que, de no recargar el bono, pasan de pagar 0,35 céntimos por viaje (precio ordinario, que es menor en algunos casos bonificados) a los 1,20 euros que cuesta el billete sencillo. A ellos, los responsables de los comercios solo les han podido decir que «el problema se debe a un fallo informático, que es lo único que nos comunicó la empresa», sin haber recibido más información en los últimos días.