Una charla aborda el cáncer de mama y el embarazo

Redacción
-

El jefe de Oncología Médica del CHUA, Antonio Fernández Aramburo, ofrece la conferencia organizada por la Asociación de Mujeres Afectadas de Cáncer de Mama y Ginecológico (AMAC) y el Grupo Español de Investigación en Cáncer de Mama (Geicam)

Charla sobre Cáncer de mama y embarazo, organizada por AMAC y Geicam. - Foto: Rubén Serrallé

El salón de actos de la Fábrica de Harinas acaba de celebrar una charla divulgativa, organizada conjuntamente por la Asociación de Mujeres Afectadas de Cáncer de Mama y Ginecológico (AMAC) y el Grupo Español de Investigación en Cáncer de Mama (Geicam), dirigida a la población bajo el título Cáncer de mama y embarazo, que además de contar como conferenciante con la participación del doctor Antonio Fernández Aramburo, jefe de Sección de Oncología Médica del Complejo Hospitalario Universitario de Albacete e investigador principal del Proyecto Cáncer de Mama y Deseo de Ser Madre que Geicam desarrolla a nivel nacional, se ha completado con tres testimonios de pacientes que han pasado por la dura experiencia de sufrir uno o incluso varios cánceres, caso este último de la exdelegada provincial de la Mujer, Mercedes Márquez, y después han cumplido su deseo de ser madres de forma satisfactoria, no sin antes sortear un largo camino lleno de obstáculos.

El doctor Antonio Fernández ha expuesto que afortunadamente tener un cáncer de mama durante un embarazo es algo muy excepcional, que se da en una de cada 3.000 gestantes, es decir, menos de un uno por ciento de las mujeres que se quedan embarazadas sufren durante ese período un tumor maligno de mama, siendo más frecuente que una mujer tras sufrir un cáncer de mama y una vez ha pasado un período razonable de al menos dos años de seguimiento y tratamiento decide quedarse embarazada, para lo cual muchas de esas mujeres antes se someten a un tratamiento de preservación de la fertilidad como paso previo a recibir quimioterapia u otros tratamientos que por su toxicidad pueden reducir después las posibilidades de engendrar.

En cualquier caso cuando sucede esto, tal y como ha indicado el oncólogo, se realiza siempre un plan de atención individualizado con cada paciente, para ver cual es la opción de tratamiento más adecuado que beneficie a la madre y no suponga un riesgo para el feto.

Fernández Aramburo aseguró que el 40% de los cánceres que aparecen durante el embarazo son tumores de mama, ya que es el cáncer más frecuente en la etapa gestacional de las mujeres.

No obstante, gracias al avance de la ciencia, existen muchas posibilidades terapéuticas para las pacientes que puedan encontrarse en esta situación y cada vez es más viable llevar a cabo sus deseos de convertirse en madres, a pesar de que, según el jefe de la Sección de Oncología del CHUA, sólo el 10% de las mujeres que tienen un cáncer de mama antes de los 40 años de edad pueden quedarse embarazadas.

AMAC colabora con donaciones a este Grupo Español de Investigación en Cáncer de Mama, y es precisamente este estudio de investigación que estaba huérfano de financiación, y para el que van los fondos que destinan entidades como la Asociación de Mujeres Afectadas de Cáncer de Mama y Ginecológico, el que intenta determinar si las mujeres que han sufrido un cáncer de mama se pueden quedar embarazadas, si es seguro o no tanto para la madre como para el bebé la gestación.

De aclarar estas cuestiones y desmontar falsos mitos al respecto versó la charla del oncólogo médico Antonio Fernández Aramburo, que dividió en tres situaciones distintas, que son los que se analizan en el estudio nacional en el que participa dentro de Geicam llamado Embarcam: por un lado, las mujeres que han tenido cáncer de mama durante el embarazo o inmediatamente después; otras mujeres con tumores de mama a las que antes de darles tratamientos de quimioterapia o radioterapia a la que al ser jóvenes se ha sometido a alguna técnica de preservación de la fertilidad para que pasado el cáncer en el futuro pudieran quedarse embarazadas, y mujeres que tuvieron un cáncer de mama y después se quedaron embarazadas.

Los investigadores llevan ya tres años con este proyecto, que se inició a finales de 2019, y en este tiempo cuentan con una base de datos integrada ya por casi 900 pacientes, de todos los casos que los oncólogos participantes en el estudio se encuentran a diario en sus consultas. El objetivo de la investigación no es otro que aprender de la experiencia de situaciones diferentes analizadas y mejorar el abordaje clínico de estos casos complejos.