Los enfrentamientos entre el Albacete Balompié y el Levante esta temporada tuvieron una gran carga emocional. El primer duelo, celebrado en el Carlos Belmonte, deparó uno de los mejores partidos de la temporada, con un despliegue futbolístico del más alto nivel, como si de un duelo entre dos rivales de Primera División se tratarse, aunque el resultado no pudo ser favorable para el Alba. En la segunda vuelta hubo más de 4.000 aficionados manchegos en el Ciutat de Valencia y un empate marcado por una más que rigurosa expulsión.

El Levante se presentó durante la primera vuelta, justo cuando empezaba a enganchar su mejor racha de la temporada, en la que acumuló 20 jornadas sin perder. En  el Belmonte mostró ser, en esos momentos, uno de los mejores y claros aspirantes al ascenso, lo que no amilanó a un Alba capaz de levantarse en dos ocasiones, aunque no pudiera con la tercera.

El partido comenzó con el jarro de agua fría que supuso para los de Rubén Albés el gol de Rober Ibáñez en el primer minuto, una de esas jugadas que tiran por la borda el llamado plan de partido.

El motor del Albacete, tras un primer cuarto de hora de dominio visitante, empezó a carburar gracias a Riki Rodríguez, pero todas las intenciones manchegos morían cerca del  área rival. Faltaba finalizar las jugadas y el Levante casi lo aprovecha para hacer el 2-0 en un error defensivo. Del susto se pasó al delirio, pues en la siguiente jugada, ya en el añadido de la primera mitad, una gran jugada que comenzó Djetei con un robó en la media luna del área, el balón pasó por Dubasin y Maikel Mesa, para acabar en los pies de Higinio, que empató y provocó que el Belmonte se pusiera de pie para aplaudir la preciosa jugada que acababa de presenciar.

Nada más comenzar la segunda parte el Levante volvió a golpear al anotar Campaña un penalti cometido por Boyomo sobre Bouldini, que necesitó de la revisión del VAR. El partido echaba humo, la grada estaba presenciando un fútbol de muchos kilates y el Albacete empataba otra vez en un nuevo contragolpe donde Dubasin dejaba otro balón de oro para Higinio y aunque el remate del pichichi se fue al palo, por ahí apareció Álvaro Rodríguez para hacer el 2-2.

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