La Junta recula y mantiene las fechas de caza de liebre

L.G.E.
-

El Gobierno da marcha atrás con su propuesta de limitar los días ante la caída de población por la enfermedad de maxitosis de 2018. Se prohíbe el uso de visores térmicos porque esta práctica deja en desventaja al animal

Imagen de archivo de una competición de carrera con galgos. - Foto: DAVID PÉREZ

En abril saltó la liebre. El Gobierno regional planteó en su borrador de orden de vedas reducir los días en los que se podía cazar liebre en Castilla-La Mancha, argumentando  que se había reducido bastante el número de estos animales tras el episodio de la enfermedad de mixomatosis de 2018. Así figuraba en el borrador de orden de vedas, pero finalmente la Junta ha dado marcha atrás con esta medida y en la orden definitiva, la que se publicó el 30 de mayo en el Diario Oficial, se mantiene la caza de la liebre durante toda la temporada de caza menor, es decir desde el 8 de octubre al 8 de febrero. 

La Junta ha reculado así con una medida que afectaba a los municipios por debajo de 800 metros de altitud, lo que implicaba buena parte de Albacete, Ciudad Real, Toledo y La Manchuela de Cuenca. El Gobierno regional había previsto limitar la caza de la liebre del 1 de noviembre al 21 de enero, recortándolo en 42 días respecto a la temporada general. 

La caza tradicional de liebre se hace con galgos, pero no es la única práctica cinegética. Por eso, la orden de vedas prohíbe expresamente el uso de «visores» que incluyan un convertidor de imagen, lo que se denominan visores térmicos, para la caza específica de liebres. La Junta argumenta que esta práctica «deja en desventaja al animal». 

Con otras especies que también han visto reducir su población, la Junta sí ha aprobado restricciones a la caza, que en muchos casos no son nuevas. De cara a la media veda, la época a final de verano en la que se puede volver a cazar algunas especies de aves, Castilla-La Mancha mantiene la prohibición de capturar tórtolas europeas, como pide Bruselas. Tampoco está muy boyante la codorniz y por eso se establecen cupos máximos de diez ejemplares por persona y día en Albacete, Ciudad Real y Toledo y veinte en Cuenca y Guadalajara. 

Media veda de codorniz. Empieza el 20 de agosto salvo en el caso de las comarcas agrarias de la Serranía Alta de Cuenca y Alcarria Baja, que se retrasa al 27 de agosto. Termina el 15 de septiembre.

Media veda de paloma. Del 20 de agosto al 21 de septiembre.

Conejo y liebre. Del 8 de octubre al 8 de febrero.

Perdiz. Las aves no migratorias se pueden cazar del 8 de octubre al 8 de febrero, pero la perdiz roja con reclamo va del 10 de enero a 20 de febrero en municipios de menos de 800 metros de altitud y del 23 de enero al 5 de marzo en el resto.

Ciervo. Se puede cazar del 8 de octubre al 21 de febrero, pero también en verano para control de población. 

Jabalí. Se puede cazar del 8 de octubre al 21 de febrero, pero también el resto del año en período especial para control de población.