Dentro de casi dos años y medio, 28 meses para ser exactos, la firma Navier Ingeniería deberá entregar a la MCT el proyecto de la conexión Fuensanta-Taibilla, que busca garantizar un caudal ecológico mínimo en el cauce del Taibilla aguas abajo de la Presa de Toma.

Este plazo empezó a correr el pasado 9 de octubre, de acuerdo al texto del acta firmada entre la compañía sevillana y la Mancomunidad de los Canales del Taibilla, que precisamente ayer dio cuenta de la formalización de este contrato, adjudicado por algo más de 380.000 euros.

Con este proyecto, la MCT busca de hecho dos objetivos: el primero, el ya mencionado incremento del caudal ecológico aguas abajo del azud de toma; el segundo, mantener el servicio que presta la Estación de Tratamiento de Aguas Potables (ETAP) de Letur.

Para hacerlos realidad, se marca el objetivo de mantener un caudal medio continuo de 300 litros por segundo. Además, también se pretende garantizar el suministro a los municipios que solo pueden abastecerse con aguas del río Taibilla conducidas por el primitivo sistema hidráulico.  

De entre todas las obras que deberán incluirse dentro del proyecto, las dos más importantes son una torre de toma que se haría en el embalse de la Fuensanta y un azud sumergido, que estará situado kilómetro y medio aguas abajo, y que tendrá 70 metros de largo y siete de alto. 

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