Antonio García

Antonio García


De libros

31/12/2023

Mirando listas de los mejores libros del año ya concluso, reparo en que no he leído la mayoría de ellos. Con tantas lagunas como lector, se llega a una edad en que lo más juicioso es tapar agujeros, ir a lo seguro y por tanto dejar a un lado las novedades, de las que no hay garantías que vayan a leerse dentro de 30 años. Así que mi lista debería estar surtida de libros antiguos o decididamente viejos, pero hago el esfuerzo de espigar lecturas novedosas para atenerme al componente de actualidad de la columna. Y si se habla columnistas, pueden leerse sendas antologías, la que homenajea a uno de los últimos en llegar, David Gistau (Generación Negroni) y la que redime piezas maestras de unos de los primeros (Melancolía, mundanidad y belleza, de César González Ruano). Ser aficionado a autores prolíficos garantiza una lectura inagotable. Algunos de mis escritores más estimados publican a pares: Andrés Trapiello dio una entrega más de sus diarios (Éramos otros) y una reedición de Los nietos del Cid; Alberto Olmos se adentra en la fórmula del diario levreresco (La serie de los ceros y los unos) y aporta humor (y sensatez) a la guerra de los sexos en Tía buena. Para los cinéfilos es inexcusable la lectura de Meditaciones de cine de Quentin Tarantino y los aficionados a la música no obviarán las textos autobiográficos de Lucinda Williams y Jane Birkin o el compendio de Jeff Tweedy, Un mundo en cada canción, coronados por el mastodóntico Mixing up the medicine si uno es muy dylanita. Esta columna enjuta no da para más, pero no olvido la poesía completa de Julia Uceda, enmendadora de tantos poetrastos actuales.