Óscar Dejuán

Óscar Dejuán


Atar en corto al poder ejecutivo

19/02/2024

La separación e independencia de los poderes de un estado, es la piedra angular de un Estado democrático de Derecho. Las semanas pasadas hemos analizado las condiciones para asegurar la primacía del poder legislativo y la independencia del poder judicial. ¿De quién debemos defenderlo? ?Del poder ejecutivo, que es tanto como decir, del partido político que lo encarna. Una vez alcanzada la Casa Blanca, el Kremlin o la Moncloa, la mayoría de los políticos estarán tentados de dominar la sociedad durante el resto de sus días. Hay que atar en corto al Gobierno para evitar que la democracia derive en una autocracia y el estado de derecho se convierta en un grupo de amiguetes.
El primer paso consistiría en limitar el tamaño del Gobierno. Si su presidente decide doblar el número de ministerios han de saber que la asignación presupuestaria para cada uno se reducirá a la mitad. Otro tanto le corresponderá hacer al ministro que doble el número de altos cargos.
La corrupción de los políticos está fuertemente correlacionada con el tiempo que llevan en un cargo. De ahí la importancia de restringir la duración de los cargos políticos y exigir un tiempo mínimo antes de volver a la política. Es difícil acabar con las puertas giratorias, pero sí podemos ralentizarlas. La política es un servicio que todos debiéramos ejercer de una u otra manera. Vivir de la política es un privilegio que nadie debiera tener.
El poder de los políticos se magnifica (y disimula) controlando el nombramiento de los directores de los organismos públicos. Le faltó tiempo al Gobierno para cambiar a los directivos de RTVE, CIS, INE, SEPI, CNMC, CNMV, Correos, Indra… La purga de altos cargos en la Administración desde 2019 alcanza al 82%. … Algo huele a podrido.