Óscar Dejuán

Óscar Dejuán


Líneas rojas

03/04/2023

La maternidad por sustitución de una influencer española ha conseguido que la prensa del corazón y la política compartieran la misma noticia de portada y la adornaran con argumentos éticos. Lo que nos interesa a nosotros es comprobar la coherencia de estos argumentos con los que venían aplicando para casos similares. 
La extrema izquierda ha condenado los vientres de alquiler como una forma de violencia contra la mujer. Nos alegra que hayan vuelto a referirse a la ética como una línea roja, ellos que están hartos de repetir que el progreso consiste en inventar nuevos derechos, aunque sea machacando los antiguos (por ejemplo, el derecho a la vida). Dudo que puedan responder a la madre biológica cuando les recuerde que ella es autónoma para hacer de su cuerpo lo que quiera: o tirar el feto al contenedor de residuos orgánicos o esperarse unos días para venderlo.
Los liberales aprueban la gestación por sustitución siempre que se respete la libertad de la madre gestante. Este enfoque fue el que en su día aceptó Ciudadanos y, con ciertos matices, el PSOE y el PP. Nos alegra que ahora acepten líneas rojas que limitan nuestra libertad; que el vientre de una mujer no puede ser objeto de mercadeo, como si de una incubadora se tratase. ¿Se atreverán a proyectar las líneas rojas a campos afines?
Los mandamientos de la tradición judeo-cristiana y los imperativos categóricos de Kant son los únicos criterios certeros y coherentes. Pensemos en el «no matarás» que implica el «no harás daño al prójimo, ni abusarás de él, ni harás nada que degrade su dignidad». Este mandamiento prohíbe tanto la maternidad subrogada como el aborto, la eutanasia, o el sacrificio de un niño concebido para curar a otro. Escandalizarse por la maternidad subrogada de una influencer de 68 años, y tragarse lo demás, denota mucha hipocresía.